Bluetooth

Cuando fui a la caja de mi nuevo teléfono móvil a buscar el cable USB para descargar las fotos, ¡no estaba!. Como ya me había leído el manual completo recordé que decía algo de bluetooh con su icono correspondiente, un “diente azul” que ya había yo curioseado tiempo atrás, nombre y tecnología inalámbrica que me maravilló, pero que aún no había utilizado. Así que me puse manos a la obra, muy confiada porque sé que los ordenadores Mac son bastante inteligentes. Un par de baches en el camino y, ¡listo!, ya podía transferir archivos, ya tenía las fotos del móvil para ponerlas en el blog.

Radiofrecuencias, ondas, lo que sea, para mí ¡magia!.

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